Aunque cuides tu piel, es difícil que la tengas en perfectas condiciones. Puede que no sepas que cometes errores básicos en el cuidado de la piel, empeorando su estado. Lee el artículo y asegúrate de que la rutina que llevas a cabo en tu día a día es como debería ser.
1. Tónico facial
Lavarse el rostro no es suficiente. Los geles limpiadores eliminan la capa lipídica y alteran su pH natural. Por eso es imprescindible un tónico se encarga de calmar la piel y restablecer el pH. Utilízalo después de lavarte el rostro y antes de aplicarte el sérum y la crema hidratante. El tónico se encarga de que todas la piel cumpla todas sus funciones y de que la piel tenga su escudo protector. Recuerda que todos tenemos una piel diferente, por lo que es necesario combinar los productos apropiados para la piel.
2. Desmaquillarte antes de dormir.
¿Vuelves de una fiesta y lo único que piensas es en llegar a casa para dormir? ¿Has estado ocupada todo el día y quieres dormir al llegar a casa? No dejes de desmaquillarte. Dormir con el maquillaje puesto empeora rápidamente la piel. Los poros se obstruyen y la piel no puede respirar correctamente. La piel se inflama y la piel no tiene la oportunidad de realizar la reparación intensiva que se produce por la noche.
3. Protección de la piel frente al sol
El fotoenvejecimiento es uno de los problemas más graves de la piel, causados por los rayos UVA. Recuerda que es fundamental aplicar protección solar durante todo el año. Hazte con una crema con FPS de calidad (FPS 15 en otoño e invierno, más alto en las otras dos estaciones) y úsala a diario.
4. Dejar unos minutos después de aplicar el sérum y la crema hidratante antes de irte a la cama
Si no quieres que el sérum o la crema se hundan en la almohada, no te vayas a dormir justo después de aplicarlos. Es importante que les des varios minutos. Si no lo haces, estás estropeando tu rutina de cuidado de la piel.
5. Tocarte la cara
¿Te molestan los brotes de acné y la piel inflamada? La causa puede ser que te tocas el rostro con demasiada frecuencia. Abandona este horrible hábito para dejar de transferir las bacterias de tus manos y desencadenar una nueva inflamación.
6. Abusar de los productos para el cuidado de la piel
En la rutina de cuidado del rostro, menos es más. Reduce la cantidad de crema o hidratante que utilizas. Una cantidad de crema del tamaño de una moneda es más que suficiente para el rostro. Usar demasiada cantidad acaba obstruyendo los poros de la piel provocando brotes.
7. Dieta saludable e hidratación del cuerpo
Llevar una dieta saludable en la que abunden las vitaminas y los minerales es esencial para tener una piel del rostro saludable. También hay que recordar que es importante beber suficiente agua para mantener el cuerpo hidratado. Si cuidas tu cuerpo desde dentro, seguro que te lo devolverá con un aspecto precioso.
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